FanFIC no.7, "Festival de Roma II.Rob"

 Irina realmente nos tienes a todas pegadas a la pantalla cuando vemos la palabra "Fic" de verdad que están muy buenos los relatos: GRACIAS!

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En esta ocasión el FIC es la continuación de la alfombra roja en Festival de Roma 2008, y  como lo pidieron esta contado en versión contraria: osea por Rob, donde nos cuenta su punto de vista de como visualizo las cosas... (Les cuento un secretito: Espero con ansia el fic-momento en que cortan a Angarano  Je, je!)

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FAN FIC NO. 7              FESTIVAL DE ROMA II.ROB
por Irene Mendoza


FESTIVAL DE ROMA II

  Rob    

A quién intentaba engañar, no podía estar mucho tiempo enfadado con Kristen. No era capaz. Salí del coche de los nervios y nada más poner un pie en la alfombra roja la vi. Ahí estaba, ¡por fin! Le sonreí con toda mi alma sin dejar de mirarla. ¡Qué guapa estaba! Con un vestidito blanco que dejaba ver sus preciosas piernas. Pálida, con los labios pintados de rojo, el pelo suelto y tacones. <<Sexy a más no poder, mi niña>>. Me moría por abrazarla pero Nick me hizo dirigirme hacia los cientos de fotógrafos que nos esperaban. Me coloqué en mi sitio. 

Ella vino hasta donde yo estaba y por fin pude tocarla. Me regaló una maravillosa sonrisa, la tomé por la cintura y la apreté contra mi cuerpo, aguantándome las ganas de besarla aunque solo fuese en la mejilla, delante de todos. Pero a lo que no pude resistirme fue a decirle lo mucho que la había echado de menos.

-          Hola preciosa – susurré -. Estaba deseando volver a verte.

Nos miramos fijamente. Los fotógrafos gritaban nuestros nombres y no paraban de disparar sus cámaras. Tenerla a mi lado era lo mejor de todo aquello. Nick me hizo una seña para que mirara al frente porque yo no hacía más que contemplar a Kristen. Continué apretándola contra mi cuerpo y de pronto la sentí temblar.

-          Estás temblando, ¿Te encuentras bien Kristen?

-          Sí, solo son nervios – suspiró con fuerza -. Es la emoción.

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-          Yo también me siento así – le dije al oído sin dejar de sonreír a los fotógrafos.

-          Por cierto, gracias por las rosas. Son mis favoritas – dijo apretando los labios avergonzada.

-          De nada – dije mirándola con ternura -. ¿Cómo supiste que eran mías? No llevaban tarjeta.

-          Lo supe, no sé.

Los flashes nos cegaban. De pronto cesaron y entre el gentío pude ver a un tipo que no me perdía de vista. <<Con gorra de mafioso. ¡Será hortera el Angarano!>>, pensé asqueado. Le devolví la mirada sin pestañear, desafiante, sujetando a Kristen con más fuerza. Me miró fijamente y supe que lo sabía, que tenía claro que yo la quería y que uno de los dos sobraba. Pero yo también tenía perfectamente clara una cosa: no iba a pelearme por Kristen, ella no era ningún trofeo de caza y para bien o para mal ella decidiría y yo respetaría su decisión, fuese cual fuese.  Pero eso sí, jugaría mis cartas.

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Me hicieron desfilar primero por la alfombra roja. Caminé solo mientras Kristen y Catherine se quedaban atrás entrevistadas por una televisión local que retrasmitía en directo.

¡Robert, Robert!, gritaba el gentío. ¡Bello, bellísimo!, oía a las chicas. Me sentía genial, atractivo, seguro de que Kristen me encontraba irresistible. <<¡Qué subidón! El enano lo estará flipando>>, 

 

pensé lleno de orgullo. Regresó a mi lado y volví a recibirla con los brazos abiertos, exultante.

-          ¿Mejor? – pregunté rozando su pelo.

-          Sí, ya estoy más tranquila.

Luego vino la proyección de la película con ella a mi lado. No me enteré de nada porque estuve atento a cada gesto suyo, cada respiración. No pude dejar de mirarla de reojo, de fijarme en sus movimientos, en su respiración agitada sobre todo cuando salían nuestros besos en pantalla.

-          Quedáis tan bien en cámara… Los besos son tan dulces… y muy sensuales. Sobre todo tus miradas, Rob – dijo Catherine.

 

Me alegré de que en algún lugar de la sala estuviese Mike viendo nuestra ya famosa química, contemplando cómo nos besábamos y nos tocábamos.

Cuando terminó la película miré a Kristen y me pareció que tenía los ojos llorosos. Kristen me sonrió y miró al suelo. Tenía las mejillas encendidas y estaba tan hermosa que brillaba.

Tras el estreno llegó la fiesta y se escapó de mi lado para consolar a su novio. El tipo tenía una cara de funeral que no podía con ella y no le dirigía la palabra. Ella no consiguió arrancarle ni una sonrisa a pesar de estar tan encantadora y preciosa.

<<¿Por qué pierde el tiempo con ese tipo? ¿Por qué no está conmigo?>>

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Nos retiramos pronto porque al día siguiente teníamos sesión de fotos, firma de libros en un centro comercial y rueda de prensa. Catherine me regaló el fin de fiesta al decirle a Kristen, delante de Mike, que tenía que descansar, que aun quedaba el día más duro.  Encantado vi como Kristen asentía. Y encima Ruth le daba la razón. Así que casi estaba seguro de que entre ellos no pasaría nada esa noche. Pero aun así solo el hecho de que aquel tipo durmiese junto a Kristen, pudiese tocar sus cuerpo, despertar a su lado, eran unos pensamientos insufribles. La noche anterior había sido una tortura con ella tan cerca, en la cama con él. Desesperado me había imaginado todo tipo de escenas calientes entre los dos, muerto de celos.

La sesión de fotos nos hizo madrugar mucho. Kristen fue medio dormida sobre mi hombro todo el camino hasta los jardines de Bomarzo y yo me sentía el hombre más feliz del mundo al poder tenerla tan cerca.

 

 Además sesión fotográfica significaba abrazarnos, tocarnos, mirarnos. Fue genial y después, durante la comida estuvimos solos y pudimos hablar, que era lo segundo que yo más quería.

-          ¿Y qué tal va tu película? – pregunté.

-          Bien, bueno es un papel difícil pero me gustan los retos – sonrió orgullosa para luego volver a su natural timidez -. Hago de una stripper drogadicta.

-          ¡Joder! – dije asombrado -. Eres  valiente, mucho.

El solo hecho de imaginarla ligerísima de ropa bailando en una barra me ponía enfermo de deseo.

-          No lo creo. Solo intento… – se quedó pensativa para encontrar las palabras adecuadas -, tocar un poco las narices.

Me eché a reír. Kristen torció el gesto. Había algo que la incomodaba.

-          ¿Pero? – pregunté.

-          A Mike no le gustan ese tipo de papeles.

La miré muy serio. <<¡Maldito imbécil!>>.

-          No quiero meterme donde no me llaman pero creo que eso no es asunto de él. Es tu trabajo, tu carrera y solo tú deberías decidir en eso.

Me sonrió y me miró con aquella maravillosa dulzura que solo ella tenía.

-          Gracias, yo opino lo mismo – suspiró -. Bueno, ¿y tú qué tal? ¿Tienes algo a la vista?

-          Me están ofreciendo un montón de cosas pero la mayoría son basura. Aunque he leído un par de guiones que no están mal y que me gustaría interpretar, si es que alguna vez se llevan a cabo. No sé, voy a esperar a ver qué pasa con Crepúsculo y a que lleguen buenos papeles. Voy a intentar… mantener la calma. No tengo prisa.

-          Tienes toda la razón, no te precipites. Todo llegará. Catherine piensa que vas a ser toda una estrella y creo que está en lo cierto. ¡Solo hay que oír cómo te gritan las chicas! – bajó la mirada de nuevo -. Yo creo que… que eres un gran actor y que eres capaz de todo. Solo te hace falta creértelo.

-          Gracias, lo mismo digo.

Alcancé su mano por encima de la mesa y se la cogí. Y Kristen no la retiró.

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La firma de libros fue agotadora y tremendamente ruidosa. Cientos de chicas sabían mi nombre y me decían de todo. ¡Era de locos!. <<Esto tengo que contárselo a Tom>>. Parecía que la fiebre de Crepúsculo había llegado a Europa.

De vuelta a Roma nos esperaban más entrevistas que significaban un poco más de tiempo con ella. Pasé el resto de la tarde devanándome los sesos, pensando como poder estar a solas con Kristen. Invitarla a cenar, lo que fuese. En el coche nos sentamos muy juntos e hicimos el trayecto en silencio. No hacía falta hablar, nos mirábamos y éramos solo nosotros. La tomé de la mano y me dejó, recostándose de nuevo en mi hombro. Mi niña estaba cansada y sin pensarlo la besé en la sien muy suavemente.

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Continuará .... 

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Que tal chicas están todas enganchadas  como me esta pasando a mí??.. Esta buenísimo este relato.. y dijeron por ahí: Esto está mejor que la Saga,.. Ja, ja!.. 

Una pregunta aparte..¿les gusta el Fic con imágenes o sin ellas? debemos ponerlas en los siguientes fics o las distraen?